Un momento de descuido y una decisión equivocada bastaron para convertir la rutina de un restaurante en la provincia de Moscú, Rusia, en una peligrosa emergencia.
Este jueves, dos empleadas se vieron frente a una freidora que comenzó a arder en llamas debido al aceite caliente. Sin experiencia en manejo de incendios, una de ellas cometió el error de arrojar agua sobre el aparato, lo que desencadenó un estallido de fuego que rápidamente se expandió por toda la cocina.
El incidente fue captado por cámaras de seguridad y muestra cómo las trabajadoras, en lugar de utilizar un extintor o recurrir a métodos recomendados como cubrir la freidora con una tapa metálica o un trapo húmedo, recurrieron al instinto de apagar con agua, una de las peores opciones frente a incendios de grasa. El resultado fue inmediato, las llamas se intensificaron y se propagaron por la zona en segundos.
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A pesar de lo aparatoso del fuego, las autoridades locales confirmaron que no hubo personas heridas y que el personal pudo evacuar el lugar a tiempo. El siniestro dejó daños materiales en la cocina y obligó a cerrar temporalmente el establecimiento mientras se realizan reparaciones.
Este tipo de accidentes recuerda la importancia de contar con capacitación básica en seguridad contra incendios, especialmente en espacios donde se manipula aceite y altas temperaturas.
Los bomberos recordaron que nunca debe usarse agua para apagar aceite en combustión, pues al contacto provoca una reacción violenta que expande las llamas. La medida correcta es sofocarlas con una tapa, sal o bicarbonato, o utilizar un extintor de clase K.
El hecho, que rápidamente circuló en redes sociales, ha despertado debate sobre la necesidad de reforzar protocolos de seguridad en restaurantes y capacitar mejor al personal para evitar que un error ponga en riesgo vidas y negocios.
