SEGURIDAD

Joven de 16 años es asesinada a puñaladas por seis mujeres; su madre fue testigo

De acuerdo a las versiones de los testigos, una de las chicas traía una arma blanca disfrazada de peineta esto para atacar a Gabriela Nicole, a quien apuñalaron entre 7 y 8 ocasiones

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Gabriela Nicole Pratts, de 16 años, estaba a casi nada de festejar su cumpleaños cuando cuatro jovencitas menores de edad y otras dos de más de 20 años le quitaron la vida al atacarla a puñaladas en una fiesta en la cual también se encontraba la madre de la hoy occisa, esto en hecho registrado en la localidad de Aibonito, en Puerto Rico. 

Este caso el cual ha dado la vuelta al mundo, ha causado gran consternación dado a la edad de la víctima, así como las jóvenes que perpetuaron el crimen atroz, las cuales ya han sido detenidas y quienes a su vez planearon el atentado desde tiempo atrás, dado que ya habían tenido roces con Gabriela Nicole. 

 

La secretaria de Justicia de Puerto Rico, Lourdes L. Gómez Torres, indicó al periódico El Nuevo Día que entre las arrestadas hay menores y mayores de edad.

En las investigaciones estuvo trabajando incluso el FBI, dado que se temía que las implicadas podían escapar de la isla. 

En lo que fueron los hechos, en Aiboito festejaban una fiesta del fin del verano. Dado que Gabriela Nicole ya había tenido altercado con un grupo de jóvenes, ella le solicitó a su mamá que la acompañara al evento para evitar cualquier tipo de conflicto, no obstante la chica y su madre ya se retiraban del evento rumbo a su casa, las "rivales" agarraron a la madre de la víctima y atacaron a la jovencita de 16 años.

De acuerdo a las versiones de los testigos, una de las chicas traía una arma blanca disfrazada de peineta esto para atacar a Gabriela Nicole, a quien apuñalaron entre 7 y 8 ocasiones.

Tras el ataque un joven también menor de edad intentó detenerlas pero también fue lesionado. 

 En medio del dolor, la comunidad de Aibonito, en Puerto Rico, le dio el último adiós a Gabriela Nicole, por quien su madre exigió justicia. "Mi corazón está destruido. Me lo arrancaron cuando me arrebataron a la luz de mis ojos", dijo Lisandra Rosario, madre de la chica asesinada durante el funeral.