Este sábado 21 de junio se ha reportado que 430 personas han muerto por la guerra entre Israel e Irán y es que la ofensiva comenzó a penas el 13 de junio y ya se han reportado decenas de bajas. El número de personas heridas tras los ataques es de 3 mil 500, por lo que hospitales y centros de salud están saturados por brindar atención a los afectados por la guerra.
Fue el Ministro de Salud en Irán quien dijo que el número de fallecidos y de heridos aumenta. Los reportes de la autoridad aseguran que las bajas son de civiles, es decir, ciudadanos que intentaban ponerse a salvo de la ofensiva bélica.
Lo peor podría pasar si Estados Unidos interviene y decide enviar bombarderos a Irán y es que cabe la posibilidad de que EU ayude a Israel a destruir las instalaciones subterráneas de enriquecimiento de uranio en Irán, según los expertos iniciaría la fase más peligrosa en la guerra en la actualidad.
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Además, en caso de que el líder supremo de Irán sea aniquilado, como Trump lo mencionó, no existe ninguna garantía de que sea reemplazado por algún mandatario más amigable, por lo que un contraataque sería lo más esperado y menos deseado por las naciones.
Ali Khameneí, el líder supremo de Irán, ya ha dado indicaciones en caso de que sea eliminado, según publicó este sábado The New York Times. Presuntamente, Ali Khameneí se encuentra en un búnker refugiándose de los ataques de Israel y, en caso de que muera, ya señaló a tres posibles sucesores.
Los ataques de Israel a Irán han destruido el 50% de los lanzamisiles de aquel país. Las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaron que tras los ataques, varios de sus aviones de combate destruyeron bases de misiles balísticos. Según reportes, los iraníes tienen dificultades para disparar decenas de misiles programados contra Israel.