CIERRE DE SUCURSALES

Santander cerrará las puertas de estas 18 sucursales; ¿qué pasará con sus clientes?

La medida responde a una tendencia creciente entre los usuarios bancarios que prefieren operar a través de plataformas digitales

Escrito en GLOBAL el

La institución de origen español Santander anunció que cerrará 18 de sus oficinas en Estados Unidos entre el 31 de julio y el 21 de agosto de 2025, como parte de un plan de reestructuración que busca adaptar sus operaciones al entorno digital actual.

La notificación fue presentada ante la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC) y contempla cierres en seis estados: Massachusetts (6 sucursales), Nueva Jersey (4), Pensilvania (4), Nueva York (2), Nuevo Hampshire (1) y Rhode Island (1). Este ajuste equivale al 4.5% del total de oficinas físicas de Santander en territorio estadounidense.

Clientes no perderán acceso a sus servicios

Santander confirmó que los usuarios de las sucursales cerradas no perderán acceso a sus cuentas ni a servicios financieros.

La operación continuará sin interrupciones a través de la app Santander US, la banca en línea, cajeros automáticos y atención remota por teléfono y chat digital.

Además, el banco notificará previamente a los usuarios afectados para facilitar su transición a la sucursal más cercana o a los canales digitales, confirmo un portavoz de la firma al medio Banking Dive.

El comportamiento de nuestros clientes ha evolucionado. Cada vez más personas prefieren manejar sus finanzas desde su teléfono o computadora.

Esta estrategia no es exclusiva de Santander. En todo Estados Unidos, entidades como Wells Fargo, Bank of America y Chase han comenzado a reducir su infraestructura física, priorizando la inversión en plataformas digitales más eficientes y accesibles.

Recomendaciones para clientes afectados

  • Verificar si su sucursal aparece en la lista de cierres
  • Activar y actualizar la app de Santander
  • Consultar con atención al cliente sobre canales alternos
  • Familiarizarse con los servicios de banca en línea

Con esta medida, Santander busca mantenerse competitivo, priorizando la comodidad del usuario y reduciendo costos operativos, sin comprometer la calidad del servicio.

Una muestra más de cómo la transformación digital continúa moldeando el futuro de la banca.