Diana Beltrán llegó a Roma hace 25 años, originaria de Acapulco, Guerrero, la mujer inició su sueño sin saber que iba a poner el nombre de México en alto al preparar la comida de los líderes de la Iglesia Católica como Benedicto XVI, Francisco y ahora León XIV.
Cuando Diana cumplió 19 años buscó cumplir su sueño de vivir en Europa por lo que visitó el país de Roma y terminó enamorada de su cultura, pero fue en El Vaticano donde conoció al padre de su hijo con quien terminó casándose.
Pero el amor de su pareja terminó y la necesidad de sacar adelante a su hijo la llevó a buscar nuevas alternativas, fue así como una amiga la encaminó a lo que sería su sueño: la cocina.
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Diana recuerda que en una plática, su amiga le preguntó qué sabía hacer, y ella le contestó que amaba la fiesta, que era la mujer encargada de organizar los eventos con todo tipo de comida mexicana.
Así empezó a cumplir su sueño
La mujer vio la oportunidad de abrir un restaurante, estaba a una calle del Vaticano y ahí nació "La Cucaracha", un pequeño negocio en el que sólo se servía comida mexicana y que en ocasiones sus ingredientes eran tan difíciles de conseguir que los mandaba a pedir directamente desde México.
La mujer tuvo que improvisar, los platillos tenían su toque, por ejemplo, ante la falta de hoja de maíz o de plátano, Diana envolvía tamales con papel aluminio.
Los italianos pensaban que su comida iba más encaminada al Tex-Mex, casi siempre pedían fajitas o chilli, pero Diana no preparaba eso, su comida estaba más enfocada a la tradición y les ofrecía el auténtico sabor de una tostada, un pozole, los tamales, etc.
Su entrada al Vaticano
Diana recuerda que gracias a su cercanía al Vaticano pudo cocinar para los pontífices Benedicto y Francisco, el no saber decir que no la metió en aprietos pues tuvo que modificar su manera de cocinar, la chef mexicana recuerda que le tenían prohibido cocinar con gas por lo que hacía uso de parrillas eléctricas y sus recetas cambiaban por completo.
Aún así supo enamorar los paladares no sólo de los líderes de la Iglesia Católica, también de cardenales y el personal que labora adentro del recinto católico.
Diana recuerda que tanto Francisco como Benedicto la felicitaron por su gran sazón y el sabor de sus platillos, los cuales tienen el auténtico sabor mexicano.
Su paso por Master Chef
Pero el sabor de la comida de Diana también la llevó a un reality show: MasterChef Italia, donde incursionó como una juez internacional y además dio clases para el prestigioso canal culinario Gambero Rosso.