Ante el aumento de deportaciones por parte de la administración el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) de Estados Unidos, muchos inmigrantes han tenido que esconderse o trabajar bajo el anonimato para poder seguir teniendo un ingreso económico.
También se han dado a conocer casos donde los patrones amenazan a los empleados indocumentados con bajarles sus salario o incluso llamar a ICE para que sean arrestados y deportados a sus países natales, pero ¿está permitido que esto ocurra?
Amenazas de los jefes
De acuerdo con expertos en derecho laboral, en caso de que exista una disputa entre el trabajador y el patrón y éste último amenace con realizar una denuncia ante el ICE, el empleador estaría cayendo en una represalia prohibida ya que no pueden utilizar el miedo como método de coerción, así lo establecen las leyes de inmigración de los Estados Unidos.
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Los expertos mencionan que lo mejor que un inmigrante puede hacer es guardar la calma y acudir a alguna institución de apoyo u organismos que brindan asesoría al migrante como la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional ( OSHA, por sus siglas en inglés) y la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo (NLRB, por sus siglas en inglés), las cuales protegen a los empleados sin importar su estatus migratorio.
¿Qué hacer ante la amenaza del jefe?
Los expertos mencionan que la mejor manera de reaccionar ante una amenaza por parte de tu jefe es seguir los siguientes pasos:
- Mantener la calma: No firmes ningún documento sin asesoría legal
- Documentar la situación: Las amenazas pueden venir por cualquier medio e incluso, así que guarda correos, mensajes o correos que demuestran la intimidación utilizada por el empleador. Será importante anotar las fechas y horas de los testigos
- Presentar una queja: Las personas pueden denunciar a través de OSHA llamando al 1-800-321-6742 o presentando la queja en línea, incluso acudir a otro tipo de instituciones.
- Buscar asesoría legal: Organizaciones como la American Civil Liberties Union (ACLU, por sus siglas en inglés) o el National Immigration Law Center (NILC, por sus siglas en inglés) pueden ayudar de manera gratuita
En caso de que seas víctima de un caso como estos y busques denunciar, tendrás que contar con la evidencia necesaria para demostrar las intimidaciones y asesorarte con un abogado especializado en derechos laborales e inmigración.
Así tendrás la certeza de que el caso se llevará de la mejor manera en la búsqueda de un castigo para el empleador y evitar que sigan ese tipo de prácticas.