La administración de Donald Trump ha decidido recortar el tráfico aéreo en 40 aeropuertos de Estados Unidos para tratar de aliviar la presión sobre los controladores aéreos, afectados por el cierre del gobierno federal ante la incapacidad de republicanos y demócratas de ponerse de acuerdo para extender el presupuesto hasta finales de año.
El bloqueo presupuestario cumplió ayer 36 días y se convirtió en el más duradero de la historia. La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) anunció que reducirá el tráco aéreo en 40 mercados de “alto volumen” a partir de mañana viernes. Para mantener la seguridad durante el actual cierre del gobierno.
La agencia presenta escasez de personal, debido a que algunos controladores de tráco aéreo, quienes están trabajando sin recibir pago, no se presentan a trabajar durante el cierre, lo que resulta en retrasos en todo el país.
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El administrador de la FAA, Bryan Bedford, armó que la agencia no va a esperar a que surja un problema para actuar, y señaló que el cierre está causando presiones de personal y “no podemos ignorarlo”.
Bedford y el secretario de Transporte, Sean Du y, dijeron que se reunirán con líderes de aerolíneas para determinar cómo implementar de manera segura la reducción.
El cierre de gobierno, que ayer cumplió 36 días, se convirtió en el más largo de la historia y altera la vida de millones de estadounidenses con recortes en programas federales, retrasos en vuelos y trabajadores federales sin recibir su sueldo.
La peor parte es que el gobierno restringió la ayuda alimentaria SNAP, a pesar de las órdenes judiciales para garantizar que los fondos estén disponibles para prevenir el hambre. La administración del presidente Donald Trump había anunciado con bombo y platillo que aplicaría un fondo especial, pero en realidad será algo que podría tardar semanas y a la ciudadanía sólo les llegará la mitad de lo que siempre reciben.
Trump se ha negado a negociar con los demócratas sobre sus demandas para salvar subsidios médicos que están por expirar hasta que acepten la reapertura del gobierno. Pero los esce´pticos demo´cratas cuestionan si el presidente republicano cumplira´ su palabra.
Trump, cuyo primer mandato en la Casa Blanca estableció el récord anterior de cierre gubernamental, dijo que este fue un “gran factor, negativo” en las derrotas electorales del Partido Republicano el martes, y repitió sus demandas para que los republicanos eliminen las ta´cticas de obstruccionismo en el Senado como una forma de reabrir el gobierno, algo que los senadores se han negado a hacer.
El shutdown, como se denomina al cierre gubernamental en inglés, ha provocado la suspensió de una actividad mínima de decenas de agencias estatales, desde parques naturales, museos, agencias sanitarias etc., y ha reducido la actividad de otras agencias consideradas esenciales para la seguridad, como los controladores. Pero estos trabajadores federales no están recibiendo su salario, debido a las limitaciones presupuestarias. A esto se suma el hecho de que 3,000 de los 14,000 puestos de controladores en el pai´s estaban vacantes antes del cierre, segu´n datos recopilados por The New York Times.
