Un caso de violencia escolar ocurrido en Turquía ha desatado indignación internacional, luego de que se difundiera un video en el que se observa a un director escolar empujar por las escaleras a un estudiante de 13 años diagnosticado con autismo. Las impactantes imágenes fueron captadas en el colegio Irlamaz Refik Pinar Ortaokulu, ubicado en la provincia de Turgutlu, y rápidamente se hicieron virales, obligando a las autoridades a intervenir de inmediato.
Según la información oficial, el menor, identificado con las siglas B.U.U., descendía las escaleras del plantel cuando se encontró con el director de la escuela, señalado como B.G. En la grabación de las cámaras de seguridad se aprecia con claridad el momento en que el adulto toma al niño del brazo con fuerza y lo arroja hacia las escaleras, provocando que el menor pierda el equilibrio y caiga varios escalones hacia atrás.
Tras la difusión del video en redes sociales, padres de familia, docentes y usuarios expresaron profundo rechazo por el abuso registrado, lo que llevó a que las autoridades locales intervinieran y giraran orden de detención contra el director. El funcionario escolar fue puesto bajo prisión preventiva mientras se desarrollan las investigaciones para esclarecer lo ocurrido y determinar responsabilidades.
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Durante su comparecencia, el director intentó defenderse asegurando que todo se trató de un accidente. Según su declaración, él solo intentó sostener al alumno para guiarlo hacia la salida, pero el joven habría tropezado, cayendo por sí mismo. Incluso aseguró que desde otro ángulo de la grabación se comprobaría su versión. No obstante, dicha explicación no convenció a las autoridades, quienes mantuvieron la medida cautelar dado que el niño es considerado un menor en situación de vulnerabilidad.
Actualmente, el docente se encuentra detenido acusado de “lesionar intencionalmente a un menor incapaz de defenderse”, un cargo grave que podría derivar en condena. En paralelo, el estudiante recibió atención médica tras la caída y continúa bajo observación para descartar lesiones permanentes. Las autoridades educativas también informaron que se implementarán medidas adicionales para garantizar su seguridad dentro del entorno escolar.
Mientras las investigaciones siguen en curso, el caso continúa generando debate público sobre la seguridad dentro de los centros educativos, el trato a estudiantes con autismo y la necesidad de protocolos estrictos para prevenir abusos por parte de personal responsable del cuidado de menores.