Lo que comenzó como una promesa de descanso seguro para los padres terminó en una de las advertencias más duras de los últimos años.
El Fisher-Price Rock ’n Play, un popular y muy vendido “mecedor inclinado” para bebés, fue relacionado con decenas de muertes infantiles debido a un grave fallo de diseño, su inclinación permitía que los bebés rodaran hacia adelante o de costado, quedando en una posición que les impedía respirar.
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En abril de 2019, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos (CPSC) ordenó el retiro inmediato del Rock ’n Play, tras confirmar más de 30 fallecimientos. Desde entonces, se han reportado nuevos casos que elevaron la cifra total a decenas adicionales.
La CPSC volvió a emitir alertas en años recientes, recordando a los padres que el producto sigue siendo peligroso incluso si se adquirió hace tiempo o de segunda mano.
Las investigaciones revelaron que muchos de los incidentes ocurrieron mientras los bebés dormían sin supervisión directa, contradiciendo las recomendaciones básicas de sueño seguro.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) reiteró que los bebés deben dormir boca arriba, en una superficie firme y plana, sin almohadas, juguetes, cobijas ni dispositivos que inclinen su cuerpo.
Consejos para proteger a los niños
- Evita las superficies inclinadas: ningún dispositivo con ángulo mayor a 10 grados es seguro para dormir
- Supervisa siempre al bebé cuando esté en columpios o mecedoras, incluso por pocos minutos
- No uses juguetes o cojines dentro de la cuna; pueden obstruir la respiración
- Verifica retiros de productos en el sitio oficial de la CPSC (www.cpsc.gov/Recalls)
- Reporta incidentes si notas comportamientos extraños o peligros en productos infantiles
El caso del Rock ’n Play marcó un antes y un después en la industria de artículos para bebés. Hoy, las autoridades advierten que la seguridad no se compra: se construye con información, vigilancia y amor.