Un hecho que parecía sacado de una película de acción, pero con final afortunado, ocurrió recientemente en Ulán-Udé, Rusia, cuando un hombre estuvo a punto de ser aplastado por un tranvía. Según varios pasajeros que presenciaron la escena, el hombre descendió del tranvía en una parada y, aparentemente bajo los efectos del alcohol, decidió caminar unos pasos por la acera en la misma dirección que el vehículo.
En cuestión de segundos, tropezó y cayó debajo de la carrocería del tranvía, provocando momentos de gran tensión entre los pasajeros y transeúntes. Afortunadamente, el conductor del tranvía reaccionó de inmediato, deteniendo el vehículo antes de que ocurriera una tragedia.
Varios testigos corrieron a socorrer al hombre, quien milagrosamente salió ileso, sin presentar lesiones visibles, a pesar de lo cercano que estuvo del accidente fatal. La imprudencia del sujeto no pasó desapercibida y, tras intentar retirarse del lugar, fue detenido y trasladado a la comisaría de policía por su comportamiento peligroso y su evidente estado de ebriedad.
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El incidente ha generado revuelo en redes sociales, donde se compartieron videos del momento exacto, destacando tanto la destreza del conductor del tranvía como la suerte del hombre, que escapó sin un rasguño.
Especialistas en seguridad vial recuerdan que este tipo de situaciones son un recordatorio de los peligros de caminar cerca de vehículos en movimiento, sobre todo si se consume alcohol, y exhortan a la población a extremar precauciones en transporte público y calles concurridas.