La Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) ha emitido una advertencia urgente sobre los peligros adicionales a los que se enfrentan los inmigrantes que intentan cruzar la frontera de Texas durante la temporada invernal.
El aviso, emitido por el sector de El Paso, subraya cómo las condiciones extremas de frío, los terrenos inhóspitos y el aumento del tráfico fronterizo durante los meses de diciembre y enero aumentan significativamente los riesgos para quienes intentan cruzar la frontera de manera ilegal.
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En su comunicado oficial, la CBP destacó que, durante los meses de invierno, las temperaturas en la región fronteriza pueden descender drásticamente, provocando heladas que inducen la hipotermia y la congelación. Esto representa un riesgo directo para los migrantes, que a menudo carecen de equipo adecuado para enfrentar las bajas temperaturas.
Además, el terreno de la región fronteriza, caracterizado por desiertos áridos y montañas de difícil acceso, se vuelve aún más peligroso durante el invierno.
La visibilidad limitada debido a las tormentas de nieve y las temperaturas gélidas hacen que la travesía sea extremadamente arriesgada, ya que los inmigrantes pueden perder el rumbo o quedar atrapados sin la posibilidad de encontrar ayuda.
La Patrulla Fronteriza ha subrayado que, mientras que las condiciones climáticas ya de por sí son peligrosas, el tráfico de personas en la frontera suele aumentar durante la temporada de vacaciones, lo que también incrementa la probabilidad de tragedias. Las redes de tráfico de personas aprovechan este aumento de migrantes para exponer a muchos a condiciones aún más peligrosas.
Los inmigrantes, muchos de ellos sin los recursos ni el conocimiento de las condiciones extremas, se encuentran vulnerables no solo al clima, sino también a los riesgos asociados con las organizaciones de traficantes de personas que los guían en su travesía.
El agente jefe de patrullas del sector de El Paso, Anthony Scott Good, hizo énfasis en que cruzar la frontera de manera ilegal nunca es seguro, pero los riesgos aumentan considerablemente durante el invierno.
Las personas que intentan cruzar la frontera deben ser conscientes de que, en estas condiciones, las probabilidades de sufrir una tragedia aumentan exponencialmente
La CBP también destacó que, durante este tiempo, el número de rescates realizados por la Patrulla Fronteriza aumenta considerablemente, lo que demuestra la magnitud de los riesgos a los que se enfrentan los migrantes.
Sin embargo, no todos los intentos de rescate terminan en éxito, ya que la geografía y las condiciones extremas a menudo dificultan el acceso a aquellos que se encuentran en apuros.
En este contexto, se hace un llamado tanto a las autoridades mexicanas como a las organizaciones de derechos humanos para que refuercen las medidas de protección para los migrantes, y que los esfuerzos se concentren en proporcionar información, recursos y asistencia para prevenir tragedias en la frontera.