Kimberly Cheatle, directora del Servicio Secreto de Estados Unidos, renunció esta mañana a su cargo una semana después del atentado al candidato a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump.
La ahora exdirectora desempeñó su puesto desde agosto de 2022 y tras lo sucedido con Trump sufrió muchas críticas y exigencias de que dejara su cargo, ya que hay investigaciones en su contra porque el joven tirador estaba demasiado cerca de Trump.
Asumo toda la responsabilidad por la falla de seguridad. A la luz de los recientes acontecimientos, con gran pesar he tomado la difícil decisión de renunciar como su directora.
Cheatle compareció ayer ante un comité del Congreso y fue cuestionada por las fallas de seguridad.
La exfuncionaria reconoció que el atentado a Trump fue el "fallo operativo más significativo" del Servicio Secreto en décadas.