Una terrible en tragedia se presentó en Fort Worth, en donde un hombre llamó al teléfono de emergencias 911, luego de cometer y confesar el asesinato de una mujer, quien era su esposa. Lo que dijo en la línea fue aterrador. ‘Mi suegro me va a matar; maté a su hija’, por lo que la comunidad al norte de Dallas se encuentra conmocionada.
Se trata de Christopher Robertson, quien se encuentra tras las rejas en el condado de Tarrant acusado de asesinato de una mujer, Kristlynne Robertson, a quien las autoridades identificaron como la esposa de él.
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El hombre le quitó la vida a su esposa
Este caso ha causado consternación, pues se dio a conocer que el viernes pasado, un familiar del asesino, dijo que lo encontró en condiciones de intoxicación por bebida o por drogas. Estaba en su casa en la cuadra 5500 de Whitman Avenue. El familiar, de acuerdo con las autoridades señaló que de uno de los cuartos de la casa se desprendía un olor insoportable y se trataba de la mujer que había asesinado.
El familiar señaló que la escena se volvió terrible cuando vio que Christopher tropezó, pero al voltear la mirada se percató que el cuerpo de su esposa estaba tirado en el piso. La mujer recibió un pacto de bala en el lado izquierda de la cara cerca del ojo, así como esquirlas en la cabeza.
‘Mi suegro me va a matar; maté a su hija’
El familiar del asesino dijo que lo sacó de la casa hacia el jardín y llamó al 911 y cuando llegó un oficial no le podía entender al responsable de dar muerte a la mujer. Fue hasta el día siguiente que el mismo Christopher llamó al 911 y confesó el terrible crimen. “Mi suegro me va a matar. Maté a su hija”.
Un oficial se entrevistó con Christopher y mencionó que quería ir a la cárcel, además entregó la pistola con la que mató a Kristlynne.
Christopher y Kristlynne tenían cinco hijos, por lo que la comunidad se encuentra consternada.