La desesperación de un estudiante por asistir a una fiesta lo llevó a cometer un acto sumamente peligroso: preparar un pastel adulterado con fármacos para su profesora.
Este incidente, que estuvo cerca de convertirse en tragedia, ocurrió en el colegio San Luis Gonzaga, ubicado en la provincia de Piura.
Estudiante droga a su maestra
El protagonista de esta alarmante historia es un joven de tercer año de secundaria, quien enfrentaba la posibilidad de un severo castigo por parte de sus padres debido a su bajo rendimiento en inglés.
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La docente había convocado a los tutores del alumno para discutir su desempeño académico. Sin embargo, el temor de que este encuentro le costara su asistencia a una fiesta lo impulsó a tomar medidas drásticas.
Con la intención de incapacitar a su maestra y evitar que la reunión se llevara a cabo, el estudiante trituró siete tabletas de diazepam, un potente sedante, y las mezcló en un pastel que ofreció a la docente.
La profesora, ajena a lo que ocurría, consumió el postre, pero minutos después comenzó a sentirse mal y se desvaneció frente a sus alumnos.
Emergencia médica
Al percatarse de la situación, el personal de la escuela solicitó ayuda inmediata. Paramédicos trasladaron a la maestra a un hospital local, donde los médicos confirmaron que había ingerido una dosis peligrosa del medicamento.
Tras un lavado gástrico y varios días de observación, la docente logró recuperarse por completo y regresar a casa.
El joven confesó haber planeado el incidente y fue expulsado del colegio. Las autoridades escolares y familiares reflexionan sobre la necesidad de reforzar valores y el diálogo para prevenir actos tan extremos.