Por primera vez en la guerra disputada en Europa, Rusia lanzó un misil balístico intercontinental contra Ucrania, haciendo escalar el conflicto actual a una situación delicada con las relaciones internacionales entre los países aliados.
“Un misil balístico intercontinental fue disparado desde la región rusa de Astracán” en un ataque contra la ciudad de Dnipro, en el centro este de Ucrania, indicó el Ejército del Aire en un comunicado.
Desde el inicio de la invasión rusa en 2022, esta es la primera vez que se utiliza armamento de largo alcance contra objetivos destacados en Ucrania, despertando las alertas de una guerra nuclear próxima.
“Hemos subrayado que, siguiendo nuestra doctrina, Rusia adopta una posición responsable con el fin de hacer el máximo esfuerzo para no permitir un conflicto de este tipo”, declaró el portavoz de la presidencia rusa, Dmitri Peskov, subrayando que espera que “otros países” mantengan “esta posición responsable”.
Respuesta en la guerra
Este ataque es una seria respuesta por los recientes bombardeos ucranianos, usando misiles de largo alcance Storm Shadow, que tienen un rango de más de 250 km, al día siguiente de disparar misiles estadounidenses sobre territorio ocupado por el ejército ruso.
Desde hace varios meses, Ucrania habría recibido estas ojivas por parte de sus aliados occidentales, sin el permiso para lanzarlos. Ahora, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio finalmente el visto bueno para que se utilicen contra blancos dentro de Rusia, anunció Washington el domingo.
Dicha decisión podría ser la última acción de Estados Unidos en esta guerra entre Rusia y Ucrania, pues con la entrada del republicano Donald Trump, este se mostraría mucho menos proclive a ayudar financieramente a su aliado.