En verano, por sus altas temperaturas, obliga a las víboras a moverse constantemente, por lo que el reptil llega a alojarse dentro de una casa para encontrar un lugar óptimo donde refugiarse, pero también buscará alimentarse de si hay presencia de roedores dentro del hogar.
Existen varios métodos para saber si una víbora está cerca de nuestra casa, pero también una manera práctica de ahuyentarlas es teniendo un animal que instintivamente las detesta, por lo que aquí te diremos cómo alejar al reptil de tu zona.
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¿Cómo saber que una víbora está cerca de nuestra casa?
Antes de continuar te recomendamos que en caso de ver una víbora en tu casa no intentes tomarla o capturarla, ya que podría morderte, lo mejor es que llames a algún experto para que la lleve a algún lugar seguro.
Características de presencia de víboras
- Deja huellas en forma de ‘S’
- La serpiente deja heces, las cuales tienen partes blancas como las de los pájaros
Los patos ahuyentan a las víboras
Estos animales tienen en su instinto ahuyentar a las serpientes, por lo que si ven una que está por entrar a tu patio o casa seguramente lo evitará, ya que estos animales son territoriales y harán un escándalo con su graznido.
A los patos no les gusta la presencia de las víboras y tratarán de ahuyentarlas. Los patos también pueden alimentarse de algunas víboras pequeñas serpientes que puedan masticar y digerir fácilmente.
Cabe mencionar que las víboras más grandes no podrían comerlas y representaría un problema para los patos, pero al menos alertará sobre la presencia del réptil. Los patos y las víboras son especies enemigas, esto significa que se cazarán, atacarán y se alimentarán mutuamente cada vez que se crucen.
Cada vez que se encuentren el tamaño de ambos animales determina cuál sobrevivirá.
Ahora ya sabes que tener un pato en casa puede ser de gran ayuda, además que estas aves son domesticables y las puedes tener en tu casa sin ningún problema.
Los patos pueden comer víboras venenosas y no venenosas sin verse muy afectados por el veneno, se debe a que los patos tienen cierto grado de inmunidad contra el veneno, especialmente cuando el veneno ha sido ingerido.