Un total de 150 vehículos dañados y siete muertos fue lo que dejó la masiva carambola provocada por una espesa niebla en el Estado de Luisiana, al sur de Estados Unidos.
De acuerdo a medios estadounidenses, la denominada súperniebla fue provocada por una combinación de humo de incendios y una densa suspensión de gotas de agua, misma que se presentó en la carretera interestatal 55, a unos 48 kilómetros (30 millas) de Nueva Orleans.
Esta mortal combinación causó la aparatosa carambola, donde al menos 150 autos quedaron aplastados, amontonados unos encima de otros y envueltos en llamas. Muchos de los conductores salieron de sus vehículos por sus propios medios, esperando a los servicios de emergencia a la orilla de la carretera, incrédulos de la masiva carambola.
Más de 25 personas fueron trasladadas al hospital, sin contar "muchas víctimas (que) buscaron asistencia médica por sus propios medios", dijeron las autoridades.
Hasta el lunes por la tarde, la policía estatal todavía estaba trabajando "para notificar a las familias, investigar las causas exactas de los accidentes" y coordinar con el departamento de transporte del estado para inspeccionar el puente.
Lamentablemente, en el conteo final, se reportaron siete personas fallecidas; cinco de ellas murieron por exposición química en un accidente de camión cisterna luego de chocar durante la súperniebla en la masiva carambola.