Ramiro Gonzalez, un criminal de origen latino, quien se encuentra condenado a muerte por inyección letal, tiene una pequeña posibilidad de que su petición de donar sus riñones antes de ser ejecutado, se haga realidad.
A solo 48 horas de que se cumpliera la orden, la Corte de Apelaciones Penales de Texas ordenó suspender la ejecución de Gonzales, quien fue condenado a muerte hace 15 años por secuestro, violación y asesinato, dieron a conocer medios internacionales.
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Anteriormente, la defensa del criminal, pidió al gobernador que se retrase su ejecución, por al menos un mes, tiempo suficiente para poder donar el órgano a alguien que lo necesite, recuperarse y regresar a la prisión.
Pese a que la Corte suspendió la ejecución, esto sucedió no por su deseo de donar el órgano ,sino por un error en su condena.
De acuerdo con los jueces, deberán revisar la sentencia, luego de que un experto estatal dijera que afirmó erróneamente a los miembros del jurado durante el juicio de 2006 que las personas que cometen una agresión sexual son muy propensas a hacerlo de nuevo.
"Estamos muy aliviados de que el estado de Texas no vaya a ejecutar a Ramiro Gonzáles el miércoles 13 de julio. La Corte de Apelaciones en lo Penal de Texas concedió una suspensión y ordenó al tribunal de primera instancia que considere su reclamo de falso testimonio por parte del experto del estado en el juicio", publicó la Coalición de Texas para Abolir la Pena de Muerte por medio de su cuenta de Twitter.
Ahora, Ramiro Gonzales deberá esperar por una revisión de su sentencia. La única alternativa a la condena de muerte, sería la cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional