Una misteriosa afección está contagiando a los niños. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) aumentaron a 228 los casos por hepatitis infantil en todo el mundo; mientras 50 están bajo investigación para confirmar su contagio.
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El portavoz de la OMS, Tarik Jasarevic, indicó los datos recabados en más de 200 países, quienes reportaron contagios de los niños por esta misteriosa cepa de hepatitis, la cual ataca solamente a infantes de entre un mes de nacido y hasta los 16 años.
"Hasta el 1 de mayo, se han señalado a la OMS 228 casos en 209 países y otros 50 están investigándose", informó Tarik Jasarevic a los periodistas en Ginebra.
Según el organismo, la mayoría de los pacientes se han registrado en Europa, sobre todo en Reino Unido.
Brote misterioso
Hasta el momento se desconoce el origen de esta nueva variante de hepatitis, la cual está siendo estudiada actualmente. Desde el pasado 5 de abril la OMS fue informada con 10 casos de hepatitis aguda severa de origen desconocido en niños de menos de 10 años en el centro de Escocia. Para el 8 de abril ya se habían identificado 74 casos en el Reino Unido.
Los síntomas de dicha afección son ictericia, diarrea, vómitos y dolores abdominales. Algunos casos han requerido trasplantes de hígado y al menos 3 niños han muerto por dicha enfermedad.
Ninguno de los pacientes ha sido registrado con virus comunes de la hepatitis, según los primeros informes del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) y la OMS.
Algunos especialistas de Estados Unidos piensan en un origen relacionado con un patógeno común llamado adenovirus 41, aunque por ahora sigue siendo una hipótesis. Los adenovirus, normalmente banales, provocan problemas respiratorios, conjuntivitis o problemas digestivos. Son más frecuentes en invierno y se transmiten fácilmente en guarderías infantiles y escuelas.
Muy por encima de las teorías, es un hecho que aumentaron en 228 los casos por hepatitis infantil en el mundo, reportándose 3 muertes de niños por este hecho y llamando la atención de los científicos para explicar estos cuadros clínicos.
Jesús García