Mujer denuncia robo de su bebé, pero autoridades dicen que no estaba embarazada. Gabriela Sevilla Toledo salió de su casa en Lima, Perú, porque supuestamente estaba en labor de parto, la mujer abordó un taxi, pero se sintió insegura y hasta mandó una fotografía a sus familiares.
La mujer se dirigía al hospital, donde la esperaban sus parientes, pero ella nunca llegó; sin embargo, la grabación de la cámara de seguridad de su domicilio corrobora la versión de que sí subió al carro de sitio, incluso llevaba una maleta y se le veía caminar lento.
Tras no saber de ella, familiares emprendieron una búsqueda y reportaron su desaparición. Luego de horas de no dar con ella, por fin pudieron localizarla, pero ya no tenía el bebé.
Autoridades aseguraron que la mujer presentaba "trastorno sensorio" y que fue intoxicada con una sustancia desconocida.
“La información preliminar que tenemos es que ella ha aparecido por Villa María del Triunfo. De ahí ha ido por la casa de un familiar cerca y los familiares se han enterado. La han recogido y sus padres la han traído aquí al hospital”, aseguró el jefe de la Región Policía de Lima, el general Manuel Lozada.
También expusieron que Gabriela Sevilla fue víctima de la trata de personas. Luego de lo sucedido, Migración de ese país emitió un alerta para evitar que un menor salga del país.
Las autoridades confirmaron también que la mujer estaba lastimada, pero que había logrado llegar a la vivienda de un familiar a quien pidió ayuda.
Ella misma dijo a las autoridades que su hija le había sido robada, mientras ella era amenazada de muerte.
La historia de Gabriela Sevilla da un giro inesperado
El Ministerio Público de Salud emitió un comunicado en el que asegura que la joven no tenía rastro de haber estado embarazada, que no presenta signos clínicos de gestación, parto reciente ni antiguo, pero aseguró que sí muestra lesiones traumáticas en el cuerpo.
Esta versión contrasta con lo que ella misma declaró en una rueda de prensa improvisada.
“Tengo ecografías de mi bebé como cinco veces. Quiero pensar que es un error. No quiero pensar que la fiscalía está tramando algo detrás”
“Cuando mi bebé nació no pude escucharla llorar, pero yo tengo de esperanzas de encontrarla con vida... Tengo registro de los latidos de mi hija”, aseguró Gabriela.
A pesar de que la mujer y familiares aseguran que efectivamente estaba embarazada, antes de ser dada de alta se le practicó un examen de sangre que concluye que no había estado cinta.
Gabriela Sevilla, la mujer que denunció el robo de su bebé, luego de retirarse a su casa, no ha colaborado con las autoridades, pero la investigación sigue.