El gobernador de Texas ordenó mano dura contra los migrantes haitianos que intentan llegar a Estados Unidos por las fronteras de este estado, en su visita a Del Río, Greg Abbott habló sobre las medidas que están tomando para evitar el cruce de ilegales.
A pesar de que el gobierno federal inició con la deportación masiva de migrantes haitianos y de otros países desde el pasado fin de semana, Más de 8 mil siguen acampando debajo del Puente de Entrada Internacional Del Río-Ciudad Acuña, e a la espera de una oportunidad para ingresar a Estados Unidos.
De acuerdo con el gobernador tejano, los inmigrantes comenzaron a buscar otros puntos para cruzar a lado estadounidense luego de que se creara una barrera hecha por agentes del Departamento de Seguridad Pública de Texas y de la Guardia Nacional de Texas en esta zona.
Abbott insistió en que las autoridades estatales modificarán sus operaciones para combatir la crisis migratoria en toda la frontera tejana, sin embargo no se retirarán de Del Río hasta que se ponga bajo control la situación.
"Si están pensando en venir y cruzar este río, pueden terminar con esposas en sus manos y yendo directamente a la cárcel", advirtió Abbott.
El gobernador reiteró que su operativo para arrestar y encarcelar a los migrantes que entren ilegalmente a Texas sigue en curso.
A principios de semana, Abbott envió una carta al presidente Joe Biden donde le solicita que se emita una declaración de emergencia federal para Texas, en busca de tener recursos adicionales para controlar la situación con los migrantes haitianos.
Steve McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas reafirmó lo dicho por el gobernador y aseguró que no necesitan el permiso de nadie para proteger su estado.
"Texas no necesita el permiso de nadie para proteger a Texas; no hay nada más peligroso para la seguridad pública en Texas y la seguridad nacional que una frontera internacional insegura con México", afirmó.
El gobernador de Texas ordenó mano dura ya que asegura el gobierno del presidente Biden no está haciendo lo suficiente para contener el constante flujo de migrantes hacia Estados Unidos.