INGLATERRA.- Veteranos acuden a programas experimentales de cría de abejas para afrontar trastornos psicológicos.
Mientras levanta gentilmente una tapa de un cajón con decenas de abejas italianas, Vince Ylitalo parece embelesado, lo mismo que otros veteranos de guerra estadounidenses que inspeccionan los insectos.
“Qué interesante”, comenta, señalando hacia una abeja con manchas anaranjadas de polen en sus patas traseras.
Ylitalo, quien ha sufrido de estrés postraumático tras servir casi 40 años en el ejército, incluidas dos estadías en Irak, no parecía alterado por las abejas que revoloteaban a su alrededor o se peleaban por ingresar a su panal. Todo lo contrario. Este experto en logística militar de 57 años dijo que las horas que se pasa trabajando con abejas todas las semanas en el Centro Médico para Veteranos de Manchester lo ayudaban a combatir la ansiedad y la depresión que siente.
"Estoy en este programa para tratar de tomar distancia de todas esas cosas que tengo
Dijo Ylitalo, quien ha enfrentado numerosos problemas desde que dejó el ejército en el 2017. “Me ayuda a pensar en otras cosas. Solo pienso en las abejas”.
Investigadores están empezando a estudiar los beneficios terapéuticos de las abejas. Por ahora hay poca evidencia sustancial, pero los veteranos de programas como el de Manchester aseguran que los ayuda a enfocarse, relajarse y a ser más productivos. Los programas son parte de un esfuerzo más amplio del departamento de Asuntos de Veteranos y de agrupaciones de veteranos que promueve la capacitación de soldados en tareas agrícolas.