SEGURIDAD PÚBLICA

Deportan a Tomás Yarrington de EU; lo entregan en el puente de Tijuana

Autoridades de migración entregaron a México al exgobernador de Tamaulipas; tiene pendientes legales en el país

Tomás Yarrington está en México.
Tomás Yarrington está en México.Créditos: El Mañana
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El exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, fue entregado esta mañana en la frontera en la garita de San Diego-Tijuana, y posteriormente fue trasladado a  las instalaciones de la Fiscalía General de la República para llevarle a cabo exámenes médicos.

Tras cumplir con el chequeo, fue llevado a la Ciudad de México en un vuelo especial. Yarrington, quien fuera gobernador de Tamaulipas, concluyó su condena en una prisión de Illinois el pasado julio de 2024.

Tomás Yarrington, deportado de EU

Aunque inicialmente se le impuso una pena de nueve años por un tribunal federal en Texas, su equipo jurídico logró una reducción de la sentencia. Su liberación, sin embargo, no lo exime de las acusaciones que continúan vigentes en México.

Durante su reclusión en Estados Unidos, la FGR liberó una orden de aprehensión por actividades financieras ilegales, derivadas de investigaciones que se remontan a 2009, cuando un colaborador encubierto lo señaló como facilitador de operaciones ilícitas vinculadas al crimen organizado.

En aquel entonces, la extinta Procuraduría General de la República (PGR) abrió un expediente por presunto uso de fondos de origen sospechoso.

En enero de 2024, el Ministerio Público Federal presentó ante el juzgado de procesos penales federales una solicitud formal para girar una orden de aprehensión. No obstante, la jueza Raquel Ivette Duarte Cedillo pidió corregir deficiencias en el planteamiento, lo que dejó la solicitud en suspenso hasta que los fiscales realicen los ajustes necesarios.

Condena en México

Al cumplir su condena en EE. UU. el paradero del tamaulipeco permaneció sin confirmar, lo que complicó cualquier intento de acción inmediata por parte de las autoridades mexicanas.

Con una historia legal compleja y un expediente aún abierto, el caso de Tomás Yarrington continúa siendo una pieza sin encajar en el engranaje de la rendición de cuentas de México.