El 14 de febrero, al menos seis estudiantes de entre 13 y 15 años fueron embestidos por una camioneta, que los dejó con diversas fracturas y lesiones que requerían atención inmediata; sin embargo, el hospital público que atiende esas emergencias se encontraba a 12 kilómetros que se traducían en un promedio de 25 minutos de traslado en condiciones de tráfico moderado, que suelen extenderse hasta 10 minutos más en horas pico, incluso para ambulancias que circulan con sirenas.
Si bien, todos sobrevivieron y están fuera de peligro, la distancia del poniente con respecto a los nosocomios que atienden urgencias -concentrados en el primer cuadro de la ciudad-, ha sido un factor determinante para que frecuentemente las víctimas de accidentes fallezcan en el largo traslado en el que se pierden minutos cruciales para salvar vidas.
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Por la razón anterior, las fuerzas vivas de la ciudad insisten desde hace años en la construcción de un hospital general al poniente, proyecto que ya tiene avances, mientras que al sur de la ciudad se contempla por parte del IMSS-Insabi, otra unidad hospitalaria, que completaría la cobertura médica en ambos cuadrantes de la ciudad.
Por su parte, la directora de la Secundaria 80, Xóchitl Naranjo, señaló que sin duda el contar con un hospital al poniente de la ciudad, será de grandes beneficios y que puede salvar vidas, pues incluso en accidentes escolares como el que recién sucedió -aunque se actuó de manera rápida-, se requiere de una atención en urgencias más especializada.
La administración municipal anterior, presidida por Enrique Rivas, gastó 25 millones de pesos en un proyecto para la construcción del Hospital General, sin que llegara a materializarse a pesar de la imperante necesidad de un nosocomio en el poniente de la ciudad para atender el sector más poblado de Nuevo Laredo.
Del Hospital General, se pagó un Proyecto Ejecutivo, del cual se violó el procedimiento de licitación, pues de acuerdo con datos oficiales se entregó el contrato por Adjudicación Directa, aunque en cuatro años no se materializó, del 2017 al 2020, pero sí rebasó el presupuesto que originalmente se había asignado, de acuerdo con datos de las cuentas públicas en los años antes mencionados.
“Esos terrenos finalmente son del gobierno municipal, se invirtió dinero en sus calles y avenidas para llegar, pero finalmente no se hizo nada, más que beneficiar a unos cuantos, porque se habían donado tres hectáreas, pero los dueños se quedaron con una parte, lo único que se hizo fue desarrollar esos terrenos y bueno, vamos a ver qué podemos hacer como gobierno municipal, porque lo que buscamos es que la nueva locación o lo que se vaya a decidir para construirlo, que sea la más accesible para los habitantes de la ciudad”, manifestó la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas.
LLEGA AMÉRICO A ALIVIAR
El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya vio la necesidad de construir un nuevo hospital y hace unos días anunció que planteó al Presidente de México la construcción de un nuevo hospital moderno y funcional.
EL PROYECTO PERSISTE
El subsecretario de Salud estatal, Gabriel Garza, anunció oficialmente ante los líderes sindicales la construcción del nuevo Hospital General para Nuevo Laredo, obra que arrancará este año.
Hasta ahora es el único nosocomio que se ha autorizado por el gobierno federal, afirmó Luis Alberto Zúñiga Bernal, secretario general de la Subsección 15 de la Sección 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud en Nuevo Laredo.
Dijo que una vez que este nosocomio se concluya, el Hospital Civil –Materno Infantil-, se fusionará con el personal del actual Hospital General Solidaridad, de Nuevo Laredo.