A través de Facebook varias fotos de dos personas que se metieron a bañar a un canal infestado de cocodrilos se viralizaron en las redes.
El hecho sucedió en Tampico, a solo unos metros del lugar donde un cocodrilo devoró a una indigente que se encontraba lavando su ropa en la orilla de la Laguna del Carpintero.
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Retan a cocodrilos
Las personas, según la publicación, se encontraban en estado de ebriedad y en forma temeraria se introdujeron a las aguas retando a los cocodrilos para que los atacaran.
El sitio donde sucedió el incidente es comocido como el Canal de la Cortadura.
Las aguas de este canal desemboca hacia la Laguna del Carpintero, sitio donde en este año dos personas han perdido la vida por ataques de los caimanes que son numerosos en ese sistema lagunario.
Tanto la Laguna del Carpintero y el Canal de la Cortadura son sitios que no son seguros para introducirse debido a la abundancia de cocodrilos que llegan a medir hasta 3 metros.
El reptil que cobró la vida de la última víctima se llama Juancho y es un cocodrilo de más de tres metros de longitud y cerca de 400 kilos de peso.
Falta de vigilancia
En varias de las zonas aledañas al lago no existe una reja que impida que personas se quieran meter a nadar a las peligrosas aguas del sector.
Además existe falta de vigilancia, a pesar de que el lugar es considerado un sitio turístico donde visitantes y personas del lugar acuden a pasear a la orilla de la laguna.
El Canal de la Cortadura y la Laguna del Carpintero son áreas con un alto número de cocodrilos, los cuales mucha gente piensa que fueron introducidos en ese ecosistema.
Sin embargo, el ambientalista tamaulipeco, Roque Montiel Lozano, explicó que aunque muchos piensan que los cocodrilos fueron colocados en la Laguna del Carpintero, realmente no es así.
El ecologista puntualiza que estos reptiles, los cuales son uno de los atractivos turísticos de Tampico siempre han existido en ese lugar.
“Estos son endémicos de Tampico, se trata de la especie moreletti y siempre ha estado en ese lugar. Yo recuerdo que siempre se han visto, desde niño -por los años de los 40-, ya se veía que salían”.
Refirió que últimamente los cocodrilos tienden a salirse buscando su espacio natural, pues con el paso del tiempo la marncha urbana ha invadido la laguna, pues del 100 por ciento que inicialmente era, últimamente solo queda el 30% de su tamaño original.