Con 36 temporadas a cuestas, Los Simpson siguen reinventándose, pero esta vez lo hicieron con uno de los giros más atrevidos y conmovedores en su historia: la muerte de Marge Simpson, matriarca del clan amarillo más famoso del mundo.
El episodio, titulado Estranger Things, juega con el nombre de la serie Stranger Things, y marca un antes y un después para los fanáticos. La historia se divide en dos líneas temporales: en el presente, Marge se muestra preocupada por el desmoronamiento emocional de su familia; en el futuro, 35 años más tarde, Lisa y Bart lidian con una adultez sin su madre.
Te podría interesar
Aunque no se detalla la causa de su fallecimiento, se insinúa que Marge ya no está con ellos mediante una emotiva carta póstuma, escrita por ella misma, en la que pide a sus hijos mantenerse unidos pese a su ausencia.
El clímax llega cuando Bart y Lisa viajan a Florida para reencontrarse con Homero, ahora viudo, retirado y viviendo en una residencia junto a Moe, Barney y el jefe Gorgory.
El momento más poético del episodio ocurre en la escena final: Marge asciende al más allá tomada de la mano de Ringo Starr, uno de los pocos Beatles vivos. Es un cierre simbólico, inesperadamente emocional, que pocos esperaban de una serie conocida por su humor ácido y crítica cultural.
Este capítulo ha desatado una ola de reacciones en redes sociales. Para muchos, se trata de un cambio de tono en la serie, una señal de que Los Simpson podrían estar transitando hacia una narrativa más reflexiva.
Para otros, solo es un episodio especial, en la línea de tantos que han explorado futuros alternativos.
Mientras tanto, la serie sigue alimentando su estatus de “profeta pop”. Fans en redes volvieron a sacar a relucir antiguas predicciones que parecían absurdas… hasta que ocurrieron. Desde la presidencia de Trump hasta la pandemia del COVID-19, Los Simpson han “anticipado” más de 30 eventos.
Ahora, algunos usuarios aseguran que un viejo episodio relacionado con el apocalipsis podría encajar con los actuales conflictos internacionales.
Frente a las teorías, Matt Selman, productor ejecutivo, fue claro: “Tenemos buenos guionistas, no bolas de cristal”. Lo cierto es que, a más de 30 años de su estreno, Los Simpson siguen sorprendiendo, emocionando y generando conversación, incluso cuando lo hacen con un adiós.