Uno de los entretenimiento de chicos y grandes es la lucha libre, donde cada vez más los luchadores se esmeran por dar el mejor espectáculo, pero en algunos casos son tan extremistas que se salen de control.
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Incluso con tal de impresionar al espectador, los luchadores ponen en riesgo su vida. Tal es el caso de un luchador que se prendió en llamas.
Se trata de Randy Orton, un luchador de la WWE, que estaba dando un show con su rival 'The Fiend' Bray Wyatt.
El espectáculo extremista, fue organizado por una promotora independiente de nombre Pro Wrestling Trainwreck, quienes no midieron el riesgo en que expusieron a los luchadores.
Todo ocurrió en Indiana, cuando Eric Ryan tomó un recipiente con gasolina para rociarlo a su contrincante, y posteriormente le ¡prendió FUEGO!, acción que se salió de control total.
Este terrible suceso quedó plasmado en las redes sociales, luego de que uno de los espectadores lo publicará desde su cuenta de Twitter.
En el video se observa como una lucha normal, los aficionados disfrutando el espectáculo, y los luchadores en su tradicional riña.
Pero, luego algo parece no ser parte del show, ya que luego de que el luchador es rociado con gasolina y prendido en fuego, este corre desesperadamente mientras las llamas crecen, y sólo se puede ver una bola de fuego en el lugar.
Por lo que tanto los asistentes del lugar y el árbitro, preocupados por la situación y la salud del luchador intentaron apagar la bola de fuego inmediatamente.
De acuerdo a los datos proporcionados por las autoridades de salud, el luchador terminó con quemaduras de segundo grado.
Luego de viralizarse la publicación, algunos aficionados repudiaron el extremismo del espectáculo y que se haya salido de control, además de que exigieron equipo necesario para prevención y seguridad de los luchadores.