Como cada año, en la esquina de las calles Hidalgo y Matamoros durante la temporada de Día de Muertos, se monta un pequeño puesto repleto de elementos que no pueden faltar en la instalación de un altar de difuntos, como son las calaveras de azúcar, ataúdes, altares en miniaturas, papel picado y veladoras, entre otros.
El negocio con más de 20 años, ubicado en el Centro Histórico de la ciudad, desde la primera semana de octubre puso a la venta las típicas calaveritas de azúcar; además, los artículos mencionados llenan de color el lugar y atraen la atención de quienes transitan por las conocidas calles a un costado del Mercado Maclovio Herrera, donde pueden conseguir todo lo necesario para decorar los altares, una de las tradiciones más representativas de nuestro país.
Noemí Simón, encargada del puesto, continúa con la tradición familiar de vender en esta temporada las coloridas y dulces calaveras de azúcar, que se pueden conseguir desde 20, 50 y 70 pesos en adelante, dependiendo el tamaño.
“En este mes de octubre estamos vendiendo las calaveritas, pero también tenemos papel picado, veladoras y otros dulces mexicanos de calabaza y camote, que son de la temporada, la gente ya nos conoce y ya comienzan a comprar las calaveritas para los altares”, comentó.
Para Noemí, la última semana antes del 2 de noviembre es cuando se elevan las ventas y este año en su puesto se pueden encontrar Catrinas, ataúdes, ofrendas de platillos de comida en miniatura y hasta pequeños altares, todo elaborado de dulce a base de azúcar. Mencionó que sus principales clientes son los maestros y padres de familia de las escuelas, donde realizan exhibiciones y concursos de altares, con lo que fomentan las tradiciones mexicanas como el Día de Muertos.
El puesto de Noemí está abierto al público de lunes a sábado, de 8:00 de la mañana a 7:00 de la tarde y domingos, de 9:00 de la mañana a 4:00 de la tarde.
