Derivado de la tormenta que azotó la ciudad la noche del martes, decenas de instituciones educativas sufrieron daños considerables en su infraestructura, siendo algunos preescolares los más afectados, como el Jardín de Niños Rosalinda Lozano Coronado y el Roberto Gómez Lugo, con grandes pérdidas materiales.
En el caso del Rosalinda Lozano Coronado, ubicado en Colinas del Sur, las fuertes ráfagas de viento lograron derrumbar una barda perimetral, aparatos de aires acondicionados y desprender el papel granito de los techos de los salones, así como causar daños en un área de juegos recién rehabilitada.
“Estamos un poco tristes porque hace tres años, cuando pasó una tormenta, tuvimos grandes daños y apenas con el recurso del programa La Escuela es Nuestra, acabamos de hacer la inauguración el pasado viernes de la restauración de ciertas áreas que estaban destruidas desde hace tres años y ahora nos vuelve a tocar esta situación”, expresó Mercedes del Carmen Hernández Garza, directora.
Detalló que entre los destrozos están 11 equipos de minisplit que se cayeron con el viento, la barda perimetral, una techumbre de la entrada, luminarias, el área de juegos y el papel granito de los techos que servía como impermeabilizante, por lo que teme que ante la llegada de la temporada lluvias se vaya afectar el material de trabajo dentro de las aulas.
Por su parte, el Jardín de Niños Roberto Gómez Lugo, enclavado en la colonia Valles del Paraíso, también se vio afectado con el derribamiento de aires acondicionados, árboles caídos y vidrios rotos.
“Tuvimos muchos destrozos, todos mis aires acondicionados se cayeron, incluso uno no lo encontramos y se nos cayó un gran árbol frente a las aulas y una obra que tenemos inconclusa fue dañada en los vidrios de las ventanas, yo para poder ingresar tuve que quitar muchas ramas por el portón, en la principal se nos cayó un pizarrón muy pesado para nosotras y no lo pudimos levantar para poder entrar por la entrada principal, aunado a eso no tenemos luz y ni servicio de agua”, manifestó Alpha González Medina, directora.
Resaltó que desean que las autoridades competentes les brinden el apoyo, pues están conscientes de que no es culpa de nadie, así es la naturaleza, sin embargo, se viene la temporada de calor más intenso y, al quedar los aires acondicionados en malas condiciones, será difícil atender a los menores en sus respectivos salones de clases.
“Todos estamos sufriendo las inclemencias del tiempo y si los aires no se dan abasto, ahora con los ventiladores no será suficiente, no podemos dar las clases bajo la techumbre porque tiene láminas sueltas y es un peligro tanto para los niños como para los maestros, pienso que no serían las condiciones adecuadas para impartir las clases a los alumnos”, añadió.
“En el Consejo Técnico (hoy) vamos a valorar estrategias y en base a eso emitir un juicio a favor de los niños por su educación, sobre todo queremos que logren su aprendizaje, esa es nuestra prioridad, ojalá se solucione pronto porque ya estamos en la recta final para terminar el ciclo escolar”.